

Xilooligosacáridos
Datos breves
En humanos, dosis tan bajas como 1,4–2,8 g/día de XOS durante 8 semanas aumentan Bifidobacterium sin efectos adversos relevantes.
El interés por los prebióticos ha crecido enormemente en los últimos años. Entre ellos, los xilooligosacáridos (XOS) se han convertido en una de las fibras más prometedoras gracias a su capacidad para mejorar la microbiota intestinal y favorecer la salud digestiva.
En este artículo veremos qué son, cómo actúan en el cuerpo, qué muestran los estudios, cuál es la dosis más usada, su seguridad y sus posibles efectos secundarios.
¿Qué son los xilooligosacáridos?
Los xilooligosacáridos son pequeñas cadenas de azúcares derivadas de la xilosa, un componente natural de la fibra vegetal. Se obtienen a partir del xilano presente en materias primas como el maíz, el bambú o la caña de azúcar mediante procesos enzimáticos que lo transforman en una fibra soluble de fácil disolución y sabor neutro.
A diferencia de otras fibras más espesas o difíciles de digerir, los XOS no alteran la textura ni el sabor de los alimentos, por lo que pueden incorporarse fácilmente en bebidas, yogures o suplementos.
Su principal valor radica en su función prebiótica, es decir, sirven de alimento selectivo para las bacterias beneficiosas del intestino.
¿Cómo actúan en el cuerpo?
Los xilooligosacáridos no se digieren en el intestino delgado, por lo que llegan intactos al colon. Allí son fermentados por bacterias beneficiosas, principalmente Bifidobacterium y Lactobacillus.
Durante este proceso se generan ácidos grasos de cadena corta (como el butirato y el propionato), que ayudan a mantener la barrera intestinal, reducir la inflamación local y favorecer un entorno más saludable en el colon. Gracias a esta acción, los XOS contribuyen al equilibrio de la microbiota y pueden mejorar el bienestar digestivo de forma natural.
¿Qué dice la ciencia?
Adultos sanos
Los principales estudios en humanos se han realizado en personas sin enfermedades.
En una investigación dirigida por Childs et al. (2014), adultos de entre 25 y 65 años tomaron 8 g diarios de XOS durante tres semanas. Se observó un claro aumento de Bifidobacterium en el intestino y una ligera mejora de los niveles de colesterol HDL, junto con buena tolerancia digestiva.
Estos resultados fueron confirmados por Finegold et al. (2014), que administraron dosis más bajas (1,4 a 2,8 g diarios) durante ocho semanas y también observaron un incremento de bifidobacterias sin efectos adversos.
Más adelante, Lecerf et al. (2012) observaron que el consumo de XOS solo o combinado con inulina durante ocho semanas favoreció el crecimiento de Bifidobacterium en el intestino y mostró buena tolerancia digestiva. La combinación con inulina potenció además el aumento de Lactobacillus.
En conjunto, los ensayos clínicos en adultos sanos muestran que los XOS favorecen el crecimiento de bacterias beneficiosas y son bien tolerados incluso en dosis elevadas.
Personas con prediabetes o riesgo metabólico
Un estudio piloto de Yang et al. (2015) analizó los efectos del consumo de 2 g diarios de XOS durante ocho semanas en adultos con prediabetes.
Los resultados mostraron cambios positivos en la composición de la microbiota, con una menor presencia de bacterias asociadas a alteraciones metabólicas.
Sin embargo, los parámetros clínicos —como la glucosa o la insulina— no variaron de forma significativa, por lo que estos posibles beneficios deben considerarse preliminares.
En resumen, los XOS parecen mejorar el entorno intestinal en personas con riesgo metabólico, aunque su impacto sobre el metabolismo aún no está demostrado.
Tolerancia digestiva
Uno de los aspectos más destacados de los XOS es su excelente tolerancia gastrointestinal. Incluso en las dosis más altas estudiadas (8 g al día), no se reportaron molestias relevantes.
Gracias a su baja viscosidad y a una fermentación lenta y controlada, los XOS no suelen causar gases ni distensión abdominal, lo que los convierte en una fibra especialmente cómoda para personas con digestiones sensibles o que desean aumentar su consumo de fibra sin malestar.
Dosis y formas de consumo
Los estudios clínicos en humanos han utilizado dosis comprendidas entre 1 y 8 gramos diarios.
Las dosis más bajas (1–3 g al día) ya han mostrado efectos sobre la microbiota, mientras que las más altas (6–8 g al día) se usan en suplementos o alimentos funcionales con efecto prebiótico reforzado.
Los XOS pueden encontrarse en:
• Yogures, bebidas vegetales o batidos enriquecidos.
• Barritas o cereales con fibra añadida.
• Suplementos en polvo o cápsulas (habitualmente 1–4 g por dosis).
Para facilitar la adaptación intestinal, se recomienda empezar con dosis pequeñas e incrementarlas progresivamente, especialmente si la dieta habitual contiene poca fibra.
Efectos adversos y seguridad
La evidencia disponible indica que los xilooligosacáridos son seguros y bien tolerados.
En los ensayos clínicos realizados no se observaron efectos secundarios relevantes, ni alteraciones en los análisis de sangre o en la función intestinal.
En personas muy sensibles, el aumento brusco de la dosis puede causar una ligera sensación de gases o más frecuencia de deposiciones, efectos que suelen desaparecer con el tiempo.
Tampoco se han descrito interacciones con medicamentos ni contraindicaciones conocidas. Por ello, los XOS se consideran una fibra adecuada para el consumo habitual en adultos sanos.
Conclusiones
Los xilooligosacáridos son una fibra prebiótica natural y bien tolerada, capaz de mejorar el equilibrio de la microbiota intestinal y favorecer el bienestar digestivo.
La evidencia demuestra que su consumo diario, incluso en pequeñas cantidades, aumenta la presencia de bacterias beneficiosas sin producir efectos adversos.
Aunque los estudios metabólicos aún son limitados, los XOS representan una alternativa eficaz y segura para quienes buscan reforzar la salud intestinal de forma natural, dentro de una dieta equilibrada y rica en fibra.
Referencias
- Childs CE, Röytiö H, Alhoniemi E, Fekete AA, Forssten SD, Hudjec N, Lim YN, Steger CJ, Yaqoob P, Tuohy KM, Rastall RA, Ouwehand AC, Gibson GR. Xylo-oligosaccharides alone or in synbiotic combination with Bifidobacterium animalis subsp. lactis induce bifidogenesis and modulate markers of immune function in healthy adults: a double-blind, placebo-controlled, randomised, factorial cross-over study. Br J Nutr. 2014 Jun 14;111(11):1945-56. doi: 10.1017/S0007114513004261. Epub 2014 Mar 24. PMID: 24661576.
- Finegold SM, Li Z, Summanen PH, Downes J, Thames G, Corbett K, Dowd S, Krak M, Heber D. Xylooligosaccharide increases bifidobacteria but not lactobacilli in human gut microbiota. Food Funct. 2014 Mar;5(3):436-45. doi: 10.1039/c3fo60348b. PMID: 24513849.
- Lecerf JM, Dépeint F, Clerc E, Dugenet Y, Niamba CN, Rhazi L, Cayzeele A, Abdelnour G, Jaruga A, Younes H, Jacobs H, Lambrey G, Abdelnour AM, Pouillart PR. Xylo-oligosaccharide (XOS) in combination with inulin modulates both the intestinal environment and immune status in healthy subjects, while XOS alone only shows prebiotic properties. Br J Nutr. 2012 Nov 28;108(10):1847-58. doi: 10.1017/S0007114511007252. Epub 2012 Jan 23. PMID: 22264499.
- Yang J, Summanen PH, Henning SM, Hsu M, Lam H, Huang J, Tseng CH, Dowd SE, Finegold SM, Heber D, Li Z. Xylooligosaccharide supplementation alters gut bacteria in both healthy and prediabetic adults: a pilot study. Front Physiol. 2015 Aug 7;6:216. doi: 10.3389/fphys.2015.00216. PMID: 26300782; PMCID: PMC4528259.