Vitamina B12

La vitamina B12, también conocida como cobalamina, es una vitamina hidrosoluble esencial para el funcionamiento normal del cerebro, la formación de glóbulos rojos y la síntesis de ADN.

Datos breves

  • La vitamina B12, también conocida como cobalamina, es una vitamina hidrosoluble esencial para el funcionamiento normal del cerebro.
  • La vitamina B12 también contribuye a la formación de glóbulos rojos y la síntesis de ADN.
  • Solo se encuentra de forma natural en alimentos de origen animal (carne, pescado, huevos, lácteos)

Solo se encuentra de forma natural en alimentos de origen animal (carne, pescado, huevos, lácteos) y requiere del factor intrínseco gástrico para su absorción intestinal. Su deficiencia es frecuente en personas mayores, veganos, y pacientes con alteraciones gastrointestinales.

¿Cómo actúa?

Síntesis de ADN y metilación

La vitamina B12 es clave para que nuestras células puedan copiar correctamente el material genético (ADN) y producir nuevas células sanas, ya que participa en procesos que activan o desactivan genes y ayudan a construir las “piezas” del ADN.

Formación de glóbulos rojos

Facilita la maduración de los eritrocitos en la médula ósea. Su deficiencia provoca anemia megaloblástica por interrupción en la síntesis de ADN.

 Función neurológica

Interviene en la síntesis de mielina, sustancia que recubre y protege las fibras nerviosas. Su déficit prolongado causa neuropatías periféricas, pérdida sensitiva y deterioro cognitivo.

Metabolismo energético

Participa en reacciones mitocondriales que convierten ácidos grasos y aminoácidos en energía.

Función neurológica

  • Participa en la síntesis de mielina, sustancia que recubre los nervios. Su deficiencia puede causar neuropatías.
  • Metabolismo energético.

Interviene en la transformación de ácidos grasos y aminoácidos en energía a nivel mitocondrial.

Beneficios según la evidencia científica

Prevención de anemia megaloblástica

Green y su equipo en 2017 mostraron en una revisión clínica que la deficiencia de vitamina B12 es una de las principales causas de anemia megaloblástica, especialmente en adultos mayores. La suplementación oral (1.000 µg/día) fue efectiva para normalizar los niveles de hemoglobina.

Mejora de la función cognitiva en adultos mayores

Por su parte, Smith y colegas en 2010 realizaron un ensayo clínico con 271 pacientes mayores con deterioro cognitivo leve. El tratamiento con vitamina B12 (junto con ácido fólico y B6) redujo la atrofia cerebral y enlenteció el deterioro cognitivo.

Reducción de homocisteína y riesgo cardiovascular

Huang et al. (2019) desarrollaron un metaanálisis con más de 34 estudios, concluyendo que la suplementación con vitamina B12 reduce los niveles de homocisteína, un factor de riesgo independiente para enfermedad cardiovascular.

Apoyo en dietas veganas y vegetarianas

Elmadfa y Singer en 2009 destacaron que las personas que siguen dietas vegetarianas estrictas o veganas tienen mayor riesgo de deficiencia. La suplementación es esencial en estos grupos para prevenir síntomas neurológicos y hematológicos.

Embarazo y desarrollo fetal

Nie y su equipo en un estudio reciente de 2025 publicaron una revisión donde confirman que niveles maternos adecuados de B12, junto con folato, reducen el riesgo de defectos del tubo neural en el feto, como espina bífida, de forma más efectiva que el folato solo.

Trastornos neurológicos reversibles

Lachner et al. (2012) informaron casos de neuropatía periférica y trastornos cognitivos reversibles tras tratamiento con vitamina B12 en pacientes con deficiencia severa.

Formas disponibles

  • Cianocobalamina (sintética, estable y común en suplementos).
  • Metilcobalamina y adenosilcobalamina (formas activas, mejor aprovechadas a nivel celular).
  • Hidroxocobalamina (usada por vía intramuscular, más duradera).

Vías de administración

  • Oral (tabletas, sublingual).

Inyectable intramuscular (en casos de malabsorción o deficiencia grave).

Conclusiones

La vitamina B12 es esencial para numerosas funciones metabólicas y neurológicas. Su deficiencia puede provocar anemia, daño neurológico y alteraciones cognitivas, siendo más frecuente en adultos mayores, veganos, embarazadas y personas con enfermedades gastrointestinales.